BODAS GAY ...Buscar al Experto

4. Buscar al Experto

¿Necesito un Wedding Planner? 
¿Será mejor hacer todo por nuestra cuenta o pedirle a mi tía “Julia” que ayudo en el matrimonio del primo hermano del vecino? 
¿O la amiga de “Carlos” que hace fiestas infantiles tan bonitas? ¡Una wedding Planner debe ser carísima! 
¿Cuánto costará un matrimonio para 10 personas? 
¿Dónde podríamos hacerlo? 
¿Necesito un notario, un abogado, o un juez?  
¿A quién invitamos? ¿Cómo los invitamos? ¿Cómo nos vestimos? ¿Y los anillos? 

Éstas son todas preguntas que se deben estar haciendo cuando deciden comenzar el proceso de planeación. Llega la hora de comenzar a ponerle orden a las ideas y sueños. El no saber la respuesta a estas preguntas, comenzará a llenarlos de angustia y ansiedad.

Yo,  me angustio cuando el computador se apaga de repente, lo llevo donde el técnico y comienza a hablar de interfaz, board, disco duro, hardware. O peor aún cuando es el carro el que falla y el lenguaje se resume en: hay que cambiar el “mofle, la chumacera” ¡pero uhhhhh no! Eso debe ser un problema más grave en la parte interna, eso le va a costar un ojo de la cara. Por eso es mejor dejar en manos del experto temas que no conocemos. Casi en todos los casos lo barato sale caro, muy caro.

A diferencia de otros trabajos, en el nuestro no hay espacio para prueba y error, no hay posibilidad de “trabajo en los cambios y te muestro”. Nuestro trabajo tiene demasiada responsabilidad, tenemos en nuestras manos el día mas soñado de una pareja, familia y amigos. Es nuestra responsabilidad cuidar con todo el amor cada detalle, prever cada imprevisto y estar preparados para ejecutar la boda al 100%. Se imaginan un: ”perdón Ricardo, no hay comida para tu invitada vegetariana, pero prometo tenerlo claro para la próxima vez” ó “pues no sé porque, pero tengo 3 invitados sin acomodar y no tengo más sillas, prometo para tu próxima boda tener un plan de contingencia”. Adicional a esto, que son temas que tienen solución inmediata, viene los errores que cuestan dinero. 

En alguna oportunidad me contaron la historia de una pareja que gracias a no estar trabajando con un profesional en el tema, había cometido todos los errores del mundo y habían duplicado su presupuesto “apagando incendios”. Fijaron fecha, iglesia y lugar y mandaron a hacer las tarjetas en Estados Unidos. Cuando llegaron las tarjetas, tenían un error en la ortografía porque nadie se fijo en revisar ¿Qué hacer? Volverlas a imprimir.

Luego, vinieron los problemas con el lugar. Habían dado un anticipo para separar la fecha sin probar la comida y sin hacer las preguntas más básicas. La comida no les gustó, el día anterior en el mismo salón había otro evento hasta las 3am, lo que hacia casi imposible el montaje sin incurrir en gastos para doblar el personal para que ayudara a los otros a salir lo antes posible y alcanzar a montar a tiempo para la boda. En la mitad de la fiesta se quedaron sin hielo y acabaron sin licor la rumba.

¡Claramente no queremos que esto te pase a ti! Por eso queremos que cuentes con nosotros para planear y ejecutar tu boda.

Es nuestro trabajo saber la línea de tiempo general, hacer realidad sus sueños con el presupuesto que tienen, conseguir los mejores proveedores, encargarnos de los contratos y pagos. Hacer checklist, tableros de inspiración, pruebas de mesa, ajustar las agendas según la disponibilidad de los involucrados y ser el equipo que ejecuta tu boda para que este sea EL MEJOR DIA DE TU VIDA.

Un último consejo, asegúrate de que la persona con la que quieres trabajar esté certificada, tenga experiencia y ojalá por lo menos una pagina web.

Con amor,

Juanita Suzunaga

Head Wedding Planner

Por @plannereventos

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