lunes, 13 de febrero de 2012

ENTREVISTA INTIMA Y PERSONAL A VANESSA ROJAS REINA GAY DEL CARNAVAL



Les traemos una muy buena entrevista presentada en el Programa Encuentros del Canal Telecaribe a VANESSA ROJAS la reina designada por la Corporación Autónoma del Carnaval Gay de Barranquilla, CORPOGAY 2012 donde habla de la fiesta que tendrá sus días centrales entre el 18 y 21 de febrero, también comenta de su vida profesional y personal en Europa donde reside y CONFIESA QUE SU PAREJA ES UN HOMBRE CASADO CON UNA MUJER, además cuenta otras intimidades.

Vean imágenes de la bella soberana de las carnestolendas que ha hecho un gran trabajo por la gente LGBT al visitar muchos medios de comunicación tanto locales como nacionales.VIDEO y FOTOS a continuación.



'Hace tiempo que en mi cuerpo gritaba una mujer' Vanessa Rojas, la Reina Gay del Carnaval de Barranquilla

Vanessa, que es su nombre artístico como profesional de la danza, desde que se llamaba Ramón Rojas, cotizado bailarín de prestigiosas compañías como las de Gloria Peña, Fanny Mikey, María Cecilia Botero y el desaparecido David Stivel -donde compartió escenario con el hoy presentador de ‘Sweet’, Carlos Giraldo, en ‘La Jaula de las Locas’, musical que trascendió en su transformación femenina-, vive en Bruselas (Bélgica), habla tres idiomas fuera del español y lidera una revista musical del ámbito transgénero, que ha sido sensación en países nórdicos.

Le picamos la lengua.

¿En qué momento decides que lo tuyo es lo femenino, en cuerpo y alma?
“Yo siempre sentí que llevaba una mujer dentro, desde pequeñito, porque era muy femenino, y por eso tuve muchos problemas en el ámbito familiar, sobre todo con mamá, que soñaba tener un varón como mi hermano Alberto”.

¿Cómo superaste esas presiones y ese rechazo social?
“Gracias al arte, a la danza, que siempre me ha brindado una libre expresión en todo sentido: en lo que soy, en lo que sé y en lo que siento”.

¿Cuánto tiempo como bailarín?
“Quince años, ya como profesional. Y después de ‘La Jaula de las Locas’, todo el tiempo, porque esa fue la experiencia que me marcó para mi identidad femenina”.

¿Cómo fue esa despedida de Ramón Rojas, el hombrecito que fuiste?
“No fue algo traumático porque yo lo acepté con dignidad y paciencia, sólo que mi cuerpo llevaba mucho tiempo gritando la presencia de una mujer”.

¿Y cómo se fue gestando esa mujer?
“Fue un proceso largo y lento, sobre todo cuando nace de un cuerpo masculino. Hay que hacer el curso completo, empezando por desaparecer los vellos del rostro, el bigote, la barba; dejarme crecer el cabello, adelgazar la voz y asumir los roles femeninos en todo sentido, en la forma de caminar, de sentarme, de relacionarme con la gente, con mucha naturalidad, sin que parezca algo forzado, travestido”.

¿Luego vinieron las operaciones?
“Sí, ponerme busto fue algo que me llenó de mucho regocijo. Salir del quirófano con pechos nuevos significó una emoción muy grande. En ese momento me costaron tres millones de pesos, relativamente cómodo para la época, porque hoy vale un ojo de la cara”.

¿Y en qué talla quedaste?
“Como me he hecho varios implantes, tres en total, quedé en talla 38B, y muy satisfecha porque mi cirujano es de absoluta confiabilidad”.

¿Qué más te pusiste?
“Me hice liposucción para sacar cintura y una rinoplastia porque tenía nariz normalita, pero quería hacerla ver más femenina. También un levantamiento de cejas, por eso de la coquetería y la sensualidad. Y si miras detenidamente mi boca, tiene forma de corazón: delineamiento de labios, acompañado de un pequeño tatuaje”.

¿Te aumentaste glúteos, Vanessa?
“Nunca lo necesité porque de varoncito tuve una cola parada, muy costeña por cierto, que sigue siendo el centro de todas las miradas. Al hacerme la liposucción, se me pronunció más”.

¿Y operación de cambio de sexo también?
“No. Eso sí está intacto. Porque no soy transexual. Soy travesti”.

¿Te sientes bien con tu miembro viril?
“La verdad, sí; no me molesta para nada”.

¿Pero eres activa o pasiva?
“Yo soy las dos. Y como lo que tengo es absolutamente natural, funciona como tal y le doy el uso que se le debe dar”.

¿Muchos hombres en tu vida?
“Algunos, que se han quedado en mi corazón, y otros, que han pasado desapercibidos”.

Colombianos, ¿cuántos?
“Tres no más”.

¿Todos costeños o del interior?
“Todos en interiores...”.

¿Qué tal el hombre europeo, tú que llevas años viviendo allá?
“Es más abierto, tiene menos complejos, es generoso, más amable, y en mi caso, me han hecho sentir más mujer”.

¿Mejor dotados?
“La verdad, sí, pero eso depende de la raza y la nacionalidad: en ese sentido los nórdicos son campeones”.

¿Qué tal los belgas?
“Más los daneses y los alemanes”.

¿Ahora mismo tienes pareja?
“Sí, es un alemán divino que me tiene como una reina, como lo que soy”.

¿Cuánto llevas con él?
“Tres años”.

¿Qué hace él?
“Es Ingeniero de Sistemas, y trabaja con la Comisión Europea”.

¿Han hablado de matrimonio?
“No, porque él es casado”.

¡Niña!, ¿y qué haces tú con un hombre casado?
“Las relaciones de pareja en Europa son muy abiertas, y no hay tanto lío como sucede con los latinos. Además la esposa de él vive en Alemania, y yo lo comparto en Bruselas (Bélgica)”.

¿Y cómo te sientes en el papel de la ‘otra’, o amante que llamamos los colombianos?
“Yo me siento muy bien, porque no es el rol de la esposa abnegada, sumisa, que tiene que esperar al marido con la comida caliente en la casa, recogerle los calzoncillos en la ducha, y limpiar el bizcocho cada vez que orina. No, yo soy muy independiente, y cuando quiero estar con él, para eso está el teléfono. De hecho nos vemos con frecuencia”.

¿Qué haces tú en Bruselas?
“Trabajo en una revista musical transformista en ‘nigth clubs’, restaurantes o en fiestas privadas”.

¿Y tú número cuál es?
“Hago diferentes representaciones y doblajes de figuras reconocidas como Jennifer López, Celia Cruz y Gloria Estefan; siempre enalteciendo nuestra cultura latina”.

¿Pagan bien?
“Sí, no me puedo quejar. Vivo bien, me doy mis gustos, viajo mucho por Europa, y llevo una vida sana y tranquila”.

¿Seguro que ‘sana’ en Europa?, ¿con tanta permisividad?
“Por supuesto, soy juiciosa, no fumo, no bebo, y soy muy ahorrativa”.

¿Y no te aburres?
“A veces por el clima: los inviernos nórdicos son insoportables, con poca luz, largos y tediosos; pero el trabajo sigue igual y eso me relaja. En los momentos libres veo televisión en los diferentes idiomas que hablo”.

¿Y acaso cuántos idiomas hablas?
“Fuera del español; francés, inglés e italiano”.

¿Cómo se dio tu elección para representar a la comunidad gay en el próximo Carnaval de Barranquilla?
“A través de un amigo que es muy allegado al señor Jairo Polo, Presidente de la Corporación Autónoma del Carnaval Gay de Barranquilla: me llamaron, me lo propusieron y yo acepté encantada. Además que me cayó de perlas porque hacía tiempo que no venía a Barranquilla”.

¿Tu primera corona?
“Sí, nunca había estado en mi libreto”.

¿Cómo fue tu reencuentro con tu gente?
“Muy satisfactorio, la acogida inigualable,  me he ido ganando el cariño de la población LGTB de mi ciudad”.

“Mucha ‘loquita’ en Curramba?
“¡Huy!, qué plumerío, y eso que todavía no ha arrancado el carnaval”.

¿Cómo es tu orgullo gay, Vanessa?
“Muy grande. Yo me siento muy feliz, y más ahora que ostento este título”.

¿Trajiste tu alemán?
“No, pero él sigue todos mis pasos a través de facebook”.

¿Qué es lo que más te gusta de ti?
“Mi porte, es algo que he descubierto con el tiempo. Los hombres me dicen que soy muy exótica y elegante”.

¿Pero una parte en especial?
“Mi cola y mis pechos”.

¿Ese lunar que tienes en el seno izquierdo, es de verdad?
“¡Claro que es natural!”.

¿En la cola no tienes un lunar?
“No, allá no”.

¿Pecas sí?
“Pequitas en los hombros y en la espalda”.

¿Qué te erotiza de un hombre?
“Su masculinidad en todo sentido”.

¿Y su billetera?
“No, porque no soy una mujer interesada, para eso trabajo, pero no faltan las atenciones, los detalles, eso hace parte del galanteo”.

¿Cómo es una noche de amor contigo, Vanessa?
“Muy romántica, sensual, con mucha imaginación”.

¿Con la luz apagada?
“Intermedio, ojalá con velas”.

¿Velas para qué?
“Pues para iluminar el momento, bobo”.

¿Con qué licor?
“Con champaña”.

¿Te gusta llevar las riendas?
“Parte y parte, me gusta que me sorprendan, pero no que me dominen”.

¿Te gusta la brusquedad en la cama?
“¡Ah!, eso no lo permito, me molesta, me baja de nota”.

¿Utilizas esos jugueticos tan de moda hoy en día?
“No los necesito, con lo que tengo es suficiente...”.

¿En serio?
“No necesito jurártelo”.

¿Algún gel en especial?
“¡Huy!, este se me metió al rancho...”.

Uno que no falte en tu cartera...
“Sólo los que están hechos a base de agua”.

¿Arriba o abajo?
“Depende de lo que se esté haciendo en el momento”.

¿Con espejos?
“Sí, me gustan”.

¿Tomadita o sobria?
“Más bien sobria, aunque un poquito picadita: que vea y que sepa qué es lo que estoy haciendo”.

¿Qué acostumbras hacer después?, ¿acaso un cigarrillo?
“Ya te dije que no fumo”.

¿Eres de las que pregunta: ‘¿en qué estás pensando, amor’?
“No pregunto esas tonterías”.

Y tampoco preguntas, ‘¿te gustó, amor?’
“Esa pregunta está de más...”.

¿Te dolió?
“No me hizo ni cosquillas”.



VISITA A BOGOTÁ PARA VISITAR MEDIOS NACIONALES


LAS DOS REINAS (UNA ES GAY) DEL CARNAVAL DE BARRANQUILLA

El asunto de la diversidad sexual es “prevención” que poco a poco vamos superando los viejos en Colombia. Son tantos los gay, trans, bis y otras formas variadas y opciones divertidas (supongo) que es retrógrado escandalizarse.

En el Carnaval de Barranquilla “las locas” fueron perseguidas por la policía y su reinado tenía que realizarse a puerta cerrada, cada vez con más público, que obligaba a mejorar y crecer  –año tras año- el escenario.

Las presiones adversas fueron cediendo y en este 2012 las dos reinas (Andrea Jaramillo Char, oficialmente nombrada por la Alcaldía, y Vanessa Rojas, la “trans” formalmente aceptada) van de la mano, son buenas amigas, y promueven con mucha camaradería las fiestas de su ciudad. A media luz…uno podría confundirse y escoger la que no prefiere por sus gustos sexuales.

Aunque todo es relativo, dice Vanessa, que fue hombre sólo los primeros años porque después descubrió que eso no era lo suyo. Viajó a Europa y hoy “nos representa” en elegantes sitios de diversión, en show de cabaret transformista. Es bailarina profesional y sus inclinaciones (las artísticas y las otras) comenzó a mostrarlas desde niño-niña en pequeños actos de su colegio.

Por primera vez, la comunidad LGBTI fue invitada con todas las de la ley a la Lectura del Bando, ceremonia que da inicio oficial a las fiestas barranquilleras. El hecho fue interpretado como el final definitivo a la discriminación que venía afrontando esa comunidad, en el carnaval y otros escenarios públicos.

Andrea dice que Vanessa es inteligente y muy agradable, razón por la que comparte con ella la celebración. La reina oficial es Char, de la alta sociedad económica y política de la Costa, dueños de las emisoras y supermercados Olímpica, para no entrar en más detalles.


Yo hablé con las dos, muy alegremente como sí estuviéramos emparrandados. Andrea tiene un novio de plata y alta posición. Ella quiere llegar a la política pero no como congresista sino con un buen puesto en cualquier gobierno. Está en la universidad y dice estar “más preparada que un yogurt”.

Vanessa tiene un novio casado y con hijos, que vive fuera de Bélgica (donde ella reside) pero que la quiere y consiente en viajes semanales. “Es muy frecuente –nos informa ella- que señores con hogares bonitos, se toman sus recreos con hombres o mujeres de nuestra comunidad”.

La reina Gay recuerda con cariño su papel en una serie colombiana llamada “la jaula de las locas”, donde afianzó su condición sexual y salió del closet. El hombre-mujer más bella del momento –dice- era Carlos Giraldo, el presentador de sweet.

-Qué piernas tan hermosas, qué cuerpo y qué maneras, tenía Carlitos. Y todavía conserva mucho de su belleza, no obstante ser abuelo, comenta Vanessa.

Y sobre los demás nombres, cuya lista es larga, hablaremos en otra oportunidad. ¡Que viva el Carnaval de Barranquilla.

http://www.terra.com.co/todelar/articulo/html/tod35470-las-dos-reinas-una-es-gay-del-carnaval-de-barranquilla.htm#.TzjiBHznK8k.twitter



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Vanesa Rojas, reina del carnaval Lgbti, hizo historia al participar en la Lectura del Bando

Tiene un amplio recorrido en escenarios transformistas de Europa.

Vanessa Rojas, actual reina del carnaval Lgbti, hizo historia al convertirse en la primera reina de esa comunidad que participa en la ceremonia de Lectura del Bando junto a la actual soberana del Carnaval de a Barranquilla, Andrea Jaramillo Char.

Rojas tiene un amplio recorrido en Europa, donde se desempeña como estrella del performance y el cabaret transformista.

Reside en Bélgica desde hace varios años asume con seriedad su titulo real, dice su jefe de prensa John Better.

Vanesa se considera como uno de los símbolos del fenómeno socio cultural en el que se constituye el Carnaval de Barranquilla 2012.

"Ella es consciente de la responsabilidad que carga a cuestas, pues representa a una minoría que cada día se va haciendo más visible", dice Better.

Vanessa, en el tradicional barrio ‘El Carmen’ de Barranquilla, desde muy pequeña mostró inclinaciones hacia la danza, especialmente los ritmos folclóricos del Caribe.

Es así como  años más tarde entró al Teatro Nacional donde trascurrió gran parte de su trayectoria artística, participando en obras de teatro y revistas musicales donde explotó todo su talento.

Este año la Corporación Autónoma del Carnaval Gay la elige como reina central de las festividades del rey Momo, debido a su talento, carisma, y humanismo.






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