JESÚS NO NACIÓ EL 25 DE DICIEMBRE... LA HISTORIA DETRÁS DE UNA TRADICIÓN.

 

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JESÚS NO NACIÓ EL 25 DE DICIEMBRE... LA HISTORIA DETRÁS DE UNA TRADICIÓN.

Por: Efraín Marino 

@efrainmarinojr

Todos los 25 de diciembre, millones de personas en todo el mundo celebran el nacimiento de Jesús. Las decoraciones navideñas, las luces, los villancicos y el pesebre nos invitan a recordar aquel momento de la historia. Sin embargo, hay un detalle que a menudo pasamos por alto: es muy poco probable que Jesús haya nacido ese día.

La Biblia no menciona, ni el día, ni el mes exacto del nacimiento de Jesús, es más muchos también celebran la fiesta de los reyes magos, pero también cabe decir, que no eran reyes, ni tampoco magos, que muy probablemente no eran tres, pues los caminos eran peligrosos para solo tres personas en caravanas y tampoco venían de oriente, pues si la estrella que seguían aparece en el oriente ellos tendrían que venir de occidente. Los Evangelios de Mateo y Lucas, las únicas fuentes que narran este evento, ofrecen pocos detalles que permitan precisar una fecha. Sin embargo, hay pistas interesantes. Por ejemplo, Lucas menciona que unos pastores estaban cuidando a sus ovejas al aire libre cuando recibieron la noticia del nacimiento (Lucas 2:8). Esto sugiere que el evento ocurrió durante una época más cálida, ya que en los inviernos de Judea hace mucho frío y es poco probable que los rebaños permanezcan en campo abierto.

Otro dato histórico es el censo mencionado por Lucas, ordenado por el gobernador Quirino (Lucas 2:1-3). Algunos historiadores han debatido la exactitud en la fecha de esta mención, ya que los registros romanos no coinciden completamente. Sin embargo, esta narrativa refuerza la idea de que el nacimiento de Jesús ocurrió en un contexto político y social complejo, probablemente entre los años 6 y 4 a.C., durante el reinado de Herodes el Grande.

La elección de esta fecha tiene más que ver con un tema político-religioso,  que con datos históricos sobre Jesús. En el siglo IV, cuando el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano, los líderes de la Iglesia buscaron integrar elementos culturales y religiosos de los pueblos paganos.

El 25 de diciembre coincidía con varias festividades importantes en el mundo romano tales como “El Sol Invictus”. Una celebración dedicada al "sol invencible", que marcaba el regreso de los días más largos tras el solsticio de invierno. “Las Saturnales”. Era una festividad en honor al dios Saturno, caracterizada por banquetes, intercambios de regalos y alegría comunitaria.

Constantino el emperador pagano, para ganar la popularidad de los cristianos, se bautiza y se hace cristiano para unir las religiones y gobernar en paz. Al adoptar esta fecha para el nacimiento de Jesús, la Iglesia buscaba reinterpretar estos rituales a la luz del cristianismo, destacando a Jesús como la verdadera "luz del mundo".

Ahora varios siglos después, la pregunta sería si es relevante que Jesús no naciera el 25 de diciembre. Lo cierto es que esta fecha ha trascendido su origen histórico para convertirse en un símbolo de esperanza y renovación espiritual. Más allá de la fecha, lo que importa es el mensaje que se celebra; el amor incondicional de Dios, la humildad de nacer en un pesebre y la promesa de redención para la humanidad.

Conocer la historia detrás de esta tradición no le resta significado a la Navidad, sino que la enriquece. En un mundo donde el consumismo tiende a opacar el sentido profundo de estas fiestas, es un buen momento para recordar que la Navidad no se trata de fechas exactas, sino de valores que inspiran nuestras vidas.

Jesús no nació el 25 de diciembre, pero esta fecha sigue siendo una oportunidad para que su mensaje de paz y esperanza ilumine nuestros corazones. ¿Acaso no es eso lo que realmente importa?