lunes, 10 de marzo de 2025

Mi príncipe, ¡Qué lindo es poderle decir a nuestra pareja “mi príncipe”

Mi príncipe


Por Harold Sanchez*

Cuando era pequeño acostumbraba a leer mucho, incluyendo los cuentos más famosos de príncipes y princesas, y siempre escuchaba a las chicas hablar de su príncipe azul. Más que referirse al hombre correcto, hacían alusión al hombre encantador, valiente y caballeroso que siempre mostraban en los relatos clásicos.



Ahora ¿Había varones interesados en los príncipes también? Pues sí. Siempre los ha habido. ¿A cuántos nos parecía que Eric, el príncipe de la Sirenita era guapo? ¿A cuántos les llamaba más la atención Peter Pan que Wendy en el live action de 2003? Sin lugar a dudas, mucho chicos homosexuales crecieron sintiéndose atraídos por estas figuras, aunque tal vez les haya costado aceptarlo.



Hace un tiempo encontré una canción en internet llamada “Mi principe”, interpretada por un guapo chico español llamado Apolo. La temática y el video musical quedaron resonando en mí desde entonces. “A veces los sueños se cumplen y pueden ser dos príncipes los que tienen un final” dice una de las estrofas.

¡Qué lindo es poderle decir a nuestra pareja “mi príncipe”! Es una expresión que denota una sola cosa: amor, un amor que debería ser celebrado y no atacado, un amor que merece ser libre y sin ningún temor.



Es lindo tener alguien a quien amar, a quien agarrar de la mano, a quien transmitirle calor y con quien sentirnos seguros. Las expresiones de amor entre chicos deben ser normalizadas y no criminalizadas. La sexualidad no debe importar en el plano de las relaciones humanas.

Nadie tiene porqué crecer pensando que su forma de amar es extraña. Sea de chico a chica, chico a chico o chica a chica, amor es amor.

Las luchas que se han librado por años han ayudado a mejorar la calidad de vida de las personas LGBTQ+. Por eso, cada día más chicos muestran su amor en las redes sociales y en internet. Yo jamás imaginé que me atrevería a declarar mi amor en público, pero ahora me parece una experiencia extraordinaria que no cambiaría por nada. Ser libre para amar es un derecho humano y no debemos tomarlo a ligera ni considerarlo poco importante.

Debemos siempre defender nuestro derecho a amar, porque eso significa también defender nuestro derecho a ser feliz y ayudar a que más chicos se atrevan a soñar con su príncipe sin ningún remordimiento y a ser el protagonista de esas historias que crecieron viendo en su habitación.







1 comentarios :

Qué hermoso texto y más cuando hace referencia a Eric el príncipe y a la canción de Apolo el chico cantante español.

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