Lo que no te mata te hace más fuerte

Lo que no te mata te hace más fuerte

¿Te es familiar esta frase? Eso es lo que muchos dicen: “Lo que no te mata te hace más fuerte”, y así es exactamente. Cada difícil situación por la cual atravesamos nos prepara para enfrentar circunstancias aún más difíciles. 

Por Harold Sánchez*

Y es que tal cual los diamantes se forman bajo temperaturas y presión extremas, atravesando procedimientos aún más duros en los laboratorios al ser cortados y pulidos para ser convertidos en gemas preciosas, nosotros enfrentamos momentos desagradables que nos hacen odiar al mundo (o por lo menos todo a nuestro alrededor) pero los cuales a la vez nos ayudan a moldear nuestro carácter hasta ser personas de éxito. 

Si prestas cuidadosa atención, te darás cuenta de que después puedes  enfrentar los problemas mejor. Por lo tanto, cuando una nueva dificultad aparezca en tu camino, la podrás manejar con mayor fuerza y menos desesperación porque tus problemas pasados han ayudado a moldear tu carácter y te han fortalecido. 

Estas situaciones o momentos difíciles incluyen esos casos cuando somos vituperados, despreciados u hostigados, cuando lidiamos con la muerte de un ser querido, nos rompen el corazón o nuestros sueños son destruidos. Es completamente normal sentirnos miserables y desmotivados cuando circunstancias como esta nos suceden. Yo he pasado por eso: sientes que tu mundo se cae y tu corazón  se siente tan abrumado que realmente piensas si tienes suficiente fuerza para llegar al día siguiente. Tu dolor es tan grande que solo quieres terminarlo de cualquier manera.   

En esos momentos debemos mirar más allá, al futuro, y preguntarnos cómo será todo después de la tormenta. Si aún lo vemos muy tenebroso, podemos pensar en algo (o alguien) que nos pueda dar motivación para avanzar. ¿El problema? a veces es más fácil pensar negativamente sobre nuestra atroz situación en vez de buscar una solución. Es incluso más difícil olvidar un momento terrible, especialmente cuando nuestros sentimientos han sido aplastados. En mi caso solo pienso en lo que realmente me motiva: mis sueños. Siempre pienso “mientras esté vivo tendré una oportunidad para hacer las cosas bien, reparar lo que está roto, encontrar a alguien que me ame y alcanzar lo que me he propuesto lograr.”

En los casos de desprecio y rechazo, o cuando nadie te entienda, solo considera: ¿son ellos realmente importante? ¿Su opinión en serio importa? E incluso, cuando es alguien que amas (lo cual duele aún más) escucha a tu corazón, y si te dice que no haces nada malo, y si sabes que estás trabajando en tu propia felicidad, entonces avanza y recuerda: si esa persona te ama también, cualquiera problema entre ustedes terminará eventualmente, porque el amor abraza todo.

Si continúas buscando lo que quieres, a pesar de toda la negatividad a tu alrededor (y dentro de ti), entonces eres un luchador, un guerrero que se fortalece con cada batalla conquistada. ¿Entonces, te sientes un poco deprimido porque algo te desanimó y amenazó con destruirte en pedazos? Búrlate, pásale de lado y enfócate en tu felicidad. Eso es lo que debería realmente importarte. 

¿Te han derrumbado? ¿Alguien te lastimado seriamente? Levántate, enfrenta lo que debas enfrentar ¿y que si pierdes hoy?  Mientras aún estés vivo tendrás una oportunidad para ganar mañana. Recuerda: LO QUE NO TE MATA TE HACE MÁS FUERTE.   







Por Harold Sánchez, periodista
Twitter @haroldesv_ 

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